Visita guiada al Castillo, residencia de gala desde 1971, que no sólo fue uno de los muchos regalos que Dalí hizo a Gala, sino que fue el mayor exponente de su pasión amorosa, para que pudiera disfrutar de su privacidad y alejarse de él para vivir lo que quedaba de su juventud y tener su refugio de soledad y su espacio más íntimo. 

Luego iremos a Pals, donde el cultivo del arroz ha sido la actividad más emblemática de la localidad hasta la fecha, con una pequeña producción local de alta calidad, que es el orgullo de la gastronomía del Baix Empordá. 

Durante la visita guiada descubriremos uno de los recintos góticos mejor conservados de Cataluña. En el recorrido vamos a hacer una pausa, para degustar uno de los licores más populares de la región : la famosa «ratafia».